El inicio del speedway data de 1923 cuando el australiano John Hoskins decidió organizar una carrera de motos a modo de apuesta. Poco se imaginaba él que crearía una nueva modalidad deportiva.

Este deporte, debido a su dificultad y al peligro que conlleva, tan solo se practica en pistas especialmente adaptadas. Estas pistas miden entre 265 y 450 metros y los participantes deben realizar 4 giros o más en menos de un minuto.

Las motocicletas que se utilizan son específicas para ello: deben tener 2 barras de apoyo, no pueden contener titanio, deben pesar más de 77 kgs, no tienen frenos (se frena en la curva con el peso de la moto haciendo un derrape, a pesar de que alcanzan entre los 83 y los 110 km/h), etc.

Este deporte goza de una gran popularidad en Polonia e Inglaterra y se practican varias competiciones en el mundo con carreras de 4 corredores.

Un deporte de aventura y riesgo total que aporta adrenalina, ¿qué te parece? ¿Lo practicas? ¡Cuéntanos!