Nuestro runner experto, Valentín, nos explica hoy qué hora del día es la mejor para correr.
Existen muchas teorías relacionadas con el mejor momento del día para correr, aunque en realidad no se ha conseguido demostrar que existan diferencias sustanciales entre unas y otras.
Lo que está claro, es que es un aspecto relacionado más con cada corredor, ya que el factor psicológico es un condicionante muy importante a la hora de elegir el mejor momento para calzarnos las zapatillas.
Si empezamos a correr a primera hora del día, encontraremos algunos beneficios significativos, como lo agradable que resulta salir temprano, además de que nos ayuda a conseguir un tono, energía y ánimo que nos irá acompañando a lo largo de todo el día. Sin duda es una buena elección si buscamos que desaparezca la conocida fatiga que padecemos durante el transcurso de nuestra jornada laboral.
No obstante, también existen algunos inconvenientes, como el hecho de que, por norma general, cuesta más esfuerzo levantarse temprano y empezar la actividad, por lo que con el tiempo suele ser un horario en el que acabamos abandonando si no somos firmes en nuestra decisión.
En el caso de que optemos por correr a medio día, también encontramos una serie de ventajas e inconvenientes.
En primer lugar, es un buen sistema para relajarnos del estrés de la mañana y comenzar la tarde con mucha más energía. Es como un break psicológico que nos ayuda a mantener el rendimiento.
El problema suele estribar en la dificultad que tenemos para conseguir el tiempo suficiente a esta hora. Lo habitual es que nos veamos comprometidos con determinadas tareas, de forma que dispongamos de menos tiempo y, al final, durante la carrera nuestro cerebro está pensando si nos va a dar tiempo a llegar a los cometidos de la tarde.
Por último, podemos considerar salir a correr por las tardes o noches, cuando ya hemos terminado nuestra jornada y nos encontramos en pleno tránsito entre nuestras obligaciones y el momento de descanso.
Un beneficio indudable de realizar deporte a esta hora es que las personas que padecen insomnio irán viendo con el tiempo cómo este desaparece. En la actualidad solemos agotarnos más psicológicamente que físicamente, por lo que a la hora de dormir no nos encontramos físicamente lo suficientemente cansados para conciliar el sueño.
Sin duda, es la mejor opción para conseguir dormir a pierna suelta, aunque también presenta una serie de inconvenientes, y el más destacable es que al cabo del día hemos ido sufriendo estrés y cansancio considerables, por lo que cuesta un cierto esfuerzo conseguir acostumbrarnos a este horario.
Como dijimos al principio, cada uno tiene que probar los distintos horarios y realizar sus propias valoraciones basándose en su ritmo de vida, de forma que consigamos hacer del correr una experiencia agradable y saludable que nos libere de las tensiones de la vida moderna.
Personalmente mi mejor hora para correr es al atardecer. Me ayuda a valorar el día y organizar mis ideas al final de la jornada. Pero en mi caso hay un motivo imperioso que no me permite correr por las mañanas…. yo hasta que no me tomo tres cafés no soy persona y no soy capaz ni de pestañear!!