Ya que en una pista de atletismo se practican muchas actividades distintas (carreras, saltos, lanzamientos y pruebas combinadas), ésta está formada por la pista principal, los campos de saltos y los campos de lanzamientos. No obstante, debido al elevado coste al que hay que hacer frente para construir una superficie sintética que responda a estas características, es casi imposible la construcción de pistas de atletismo. Así, es frecuente encontrar superficies naturales que aprovechan campos existentes de fútbol, rugby o hockey. Sin ir muy lejos, un ejemplo es la pista de atletismo que rodeaba el antiguo campo Lluís Companys de Barcelona, en el que ha jugado durante mucho tiempo el RCD Espanyol.
Técnicamente, la longitud de una pista de atletismo tiene que ser mínimo de 4.000 metros y de 7,32 metros de ancho. Estas son las características principales, pero las instalaciones cambian en función del tipo de competición.
– En la zona de las carreras se compone de una pista circular con al menos cuatro calles, la recta con seis calles (para las carreras con vallas y la zona de salida y de llegada. Las carreras de obstáculos se hacen en la misma pista circular.
– La zona de saltos incluye la instalación para realizar el salto de longitud con el pasillo con la tabla y el foso de caída, la instalación para el triple salto, para el salto de altura y para el salto de pértiga.
– La zona de competición para lanzamientos, habilitada para el lanzamiento de disco, de martillo, de jabalina y de peso.
A pesar de que se requieran estas instalaciones, el atletismo es uno de los pocos deportes que se practica mundialmente, en parte, porque para practicarlo se necesitan pocos medios.