El Kin Ball es un deporte bastante joven comparado con otros de que hemos tratado. Nació en 1986 en Canadá de la mano de un profesor de educación física llamado Mario Demers. Quería una fórmula de juego que combinara la salud, la cooperación, el trabajo en equipo y la competitividad y así fue como creó el Kin Ball, deporte con el que se juego con un gran balón y tres equipos a la vez. Pero ¿en qué consiste este curioso deporte?
Tres equipos, mixtos y formados por cuatro personas, juegan en una pista de 20 metros x 20 metros, durante 45 minutos (en tiempos de 15 minutos). La pelota suele medir 1,22 metros. El equipo que ataca debe gritar con todas sus fuerzas “Omnikin” seguido por el color de otro equipo y lanzar la pelota con la finalidad de que toque en la cancha del equipo contrario. A su vez, este debe evitar que esto ocurra. ¡Ah! Es importante que todos los integrantes del equipo atacante toquen el baló mientras lo tiran.
Ahora viene lo mejor: si la pelota gigante toca el suelo del equipo que se ha mencionado, no solo el atacante obtiene un punto, sino también el equipo que en ese juego no ha participado. Si, por el contrario, los defensores logran coger la pelota sin que toque el suelo, ganan el punto ellos y se convierten en atacantes.
El Kill Ball es un deporte fantástico que promueve muchos valores positivos del deporte, y que a veces se pierden o no se tienen suficientemente en cuenta, para que todos los equipos estén implicados en el juego hasta el último minuto. ¿Te animas a organizar un partido de Kin Ball?