Cuando acaba marzo y empieza abril podemos disfrutar de unas de las meteorologías más suaves que podemos desear. Las temperaturas se templan poco a poco, las lluvias son abundantes y la naturaleza prospera.
Es la mejor época para buscar el contacto con el medio ambiente y encontrar nuestra cara más aventurera y más sensible con el entorno. Los deportes de primavera añaden habitualmente estos elementos, por eso la montaña es el lugar idóneo para esta época del año.
La montaña ofrece las condiciones para la práctica de muchos deportes para liberar adrenalina y las tensiones acumuladas en nuestra vida diaria.
Aunque hay mucha diversidad, hay algunos deportes que podrían ser destacados como: el rafting, la escalada, mountainbike, senderismo o trekking, u otros deportes de más o menos riesgo.
El deshielo que se produce en esta época del año, convierte el descenso por ríos (rafting o canoa, dependiendo del gusto) en un deporte con el cual recrearnos. Aunque eso sí, si no conoces el terreno es aconsejable llevar un guía y tomar todas las medidas de seguridad oportunas.
En terrenos más secos, podremos hacer ascensos por paredes verticales en la montaña haciendo escalada, practicar senderismo o recorrer la montaña montados en mountainbike, de esta forma podemos realizar grandes recorridos y fortalecer nuestros músculos.
Podemos realizar infinidad de actividades en esta época del año, aunque, sin duda, los deportes de montaña son una de las mejores opciones para cuidar el cuerpo y la mente.