A veces, no sólo tienes que esforzarte para superarte a ti mismo y alcanzar tus metas: tienes que luchar contra el mundo entero diciéndote que ni lo intentes, que eres incapaz. Eso es lo que le pasa a Jackie Kallen (Meg Ryan) en Contra las cuerdas.
La película está basada en la historia real de la primera mujer manager del boxeo estadounidense. Jackie es secretaria de un manager de boxeo mediocre. Un día, un prepotente socio de su jefe, Sam La Rocca (Tony Shalhoub) se burla de ella, seguro de que nunca llegará a nada porque “una mujer no tiene lugar en el boxeo”. Está tan convencido que le vende por un solo dólar el contrato de un boxeador recién derrotado, Luther Shaw (Omar Epps).
Así empieza la carrera de manager de Jackie: su único boxeador es un novato más aficionado a las drogas que al ring, y como entrenador sólo encuentra a Felix Reynolds (Charles S Dutton), que ya está retirado. Por si eso fuera poco, LaRocca prohíbe a todos los dueños de rings de la ciudad que le den combates. Ella sola tendrá que arreglárselas para demostrar que es tan buena como cualquier otro, e intentar que no se le suba a la cabeza…
Lo interesante de Contra las Cuerdas no es el guión (se parece mucho a otras películas de boxeo) sino lo que predica: el esfuerzo por lograr el éxito en algo que te gusta, aunque intenten disuadirte. La moraleja perfecta podría ser “si quieres, puedes…y que los demás se callen”.
Y vosotros, ¿qué película vais a ver este fin de semana?