El pasado sábado 27 de abril se celebró la IV Cursa Nocturna de la Ciutat de L’Hospitalet. Antes de empezarse a organizar esta competición, y con motivo de las fiestas de Primavera, se celebraba una carrera de 5 km que recorría las principales calles del centro de la ciudad un domingo de abril por la mañana. Se trataba de una carrera popular, en la que participábamos pocos corredores que mayoritariamente vivíamos en Hospitalet, nos explica nuestro corredor experto Valentín.
Desde el año 2010, la organización decidió dar un giro al evento y ahora se puede correr por un circuito urbano de 5 o de 10 km. Además, se cambió el horario, y pasó a celebrarse un sábado por la noche. La posibilidad de correr 10 km permitió que la carrera se inscribiera en la liga anual ChampionChip y el hecho de ser una carrera nocturna hizo que la popularidad de este evento creciera rápidamente. Dos ingredientes que, unidos a una buena organización y servicios para el corredor, han hecho que año tras año el número de participantes haya aumentado de forma espectacular. Así, si el año 2010 corrimos unos 1.000 corredores, este año hemos superado los 6.000.
Esta edición ha tenido algunas novedades, y también algunos aspectos que se deberían intentar mejorar. En la feria del corredor, donde se recoge el dorsal, la camiseta y el chip, ha sido habitual ver largas colas. La organización decidió que debíamos hacer dos colas: una para recoger el dorsal, que se repartía en varias colas según el número que tuvieras, y otra cola para recoger la camiseta (en este caso, una única cola para todos los corredores). Podéis imaginar que la aglomeración de gente ha sido habitual durante los dos días y que ha habido que armarse de paciencia. Por suerte, las personas que estaban allí siempre estaban dispuestas ha echarte una mano y facilitar la gestión.
El punto de salida ha sido el habitual, la plaza Europa, aunque este año el acceso a los cajones según el tiempo acreditado ha sido algo más ordenado que en ediciones anteriores. Parece ser que la lluvia está siendo habitual en esta carrera en los últimos años. Después de un tiempo primaveral, el sábado amaneció con un descenso importante de temperaturas y lloviendo intermitentemente. A pesar de todo, la lluvia respetó el circuito y apenas se notó un descenso de corredores.
En años anteriores, el circuito de 5 y 10 km coincidían totalmente. Se trataba de un circuito circular que debía completarse una o dos veces según participases en una u otra distancia. Este año, los dos circuitos han coincidido durante los primeros kilómetros, pero cuando los participantes de 5 km encaraban la recta final, los de 10 nos desviábamos y seguíamos nuestra carrera. Punto a favor para la organización. Lástima que hayan decidido que la carrera transcurra por la zona industrial de Hospitalet… ¿por qué no vuelve a ser una verdadera carrera urbana? ¿No sería una buena ocasión para que los corredores conozcan nuestra ciudad, el centro…? Entendemos que cortar calles para organizar un evento deportivo tiene sus complicaciones, pero un sábado a las 21:00 no creemos que sea mucho pedir.
Y como ya viene siendo habitual, al final de la carrera nos esperaba un plato de fideuá para reponer las fuerzas perdidas a causa del esfuerzo. Este sí, un gran punto para la organización.
El año que viene seguiremos apostando por la Cursa Nocturna Ciutat de L’Hospitalet. Esperamos que en su V Edición alcancemos los 8.000 corredores y se convierta en una carrera de referencia para todos.