Las personas no estamos solas en este mundo. Nos tenemos los unos a los otros y eso es una parte muy importante de nuestras vidas. Si algo puede caracterizar a la gente en movimiento es que no se pone barreras en su vida. Por eso, si estás en movimiento siempre tendrás gente a tu lado.
Últimamente se ha hablado mucho de la ayuda humanitaria debido a que con la crisis cada vez hay más gente necesitada. Y sucesos como los de los cooperantes en Mauritania ponen esta labor en el punto de mira. La solidaridad en nuestra sociedad se convierte en un eje fundamental.
Estar en movimiento no significa dejar las cosas atrás, y olvidarse. Cuando estamos en movimiento, y no nos detenemos, va ligado a interactuar con otras culturas y ayudar a los necesitados. El espíritu de solidaridad no podría estar más cercano al espíritu de hacer entrar en movimiento a la gente. Ayudar a los demás es también estar en movimiento.
¿Te imaginas moverse sin involucrarse con los demás? ¿Estar en movimiento sin superar fronteras? Para entrar en una dinámica real de movimiento la solidaridad es crucial. Ayudar, cooperar, solidarizarse… es lo que construye un verdadero movimiento social.
Cuando vemos a un deportista apoyando iniciativas solidarias, o marcas que se involucran en proyectos humanitarios simbolizan perfectamente esa unión inseparable entre deporte, gente con inquietudes y ayuda solidaria. El deporte, más allá de la rivalidad, es un gran antídoto contra la violencia y es por eso que debemos mantener una actitud activa, inquieta y solidaria a la vez.
La ayuda humanitaria es un gran ejemplo de gente con inquietud que supera cualquier tipo de barrera. No hace falta irse a ningún país extranjero para ayudar a los demás. Tenemos asociaciones y colectivos que actúan en nuestro entorno. Pero para ayudar a los demás hace falta estar en movimiento. Ponte en movimiento!!