Siempre aconsejamos prudencia y cautela cuando nos disponemos a practicar deporte. Pero en verano, más. Aumentan las temperaturas y los termómetros están en máximos, especialmente este año. Por eso debemos tener en cuenta ciertas precauciones. A continuación, te dejamos unos consejos deportivos imprescindibles para disfrutar del deporte en verano de una manera sana y segura.

Protégete del sol

El sol es un fiel aliado que puede convertirse en el peor de los enemigos. Huye de él tanto como sea posible. Intenta no exponerte al sol entre las 12 y las 17h, las horas de mayor incidencia. Sobre todo, si tienes sesiones de actividad intensa es recomendable cambiar los horarios a horas más tempranas o por la tarde, ya que las temperaturas son más suaves y te evitarán la fatiga. Recuerda también que las cremas de protección solar no solo están pensadas para la playa o la piscina. Te recomendamos darte crema al menos media hora antes de salir y utilizar una loción impermeable para evitar que se pierda con la sudoración. Las quemaduras provocadas por el sol afectan la capacidad natural del cuerpo de enfriarse. Esto conduce a calambres por calor, agotamiento o golpe de calor. Tampoco te olvides de gafas de sol, gorras y otras protecciones para cuello, nuca, brazos y piernas. E hidrata la piel después de la exposición al sol. Tu piel necesita reponer nutrientes ya que, al estar expuesta a los rayos solares, el aire y las temperaturas altas hacen que esté más reseca.

Hidrátate

Es fundamental mantener una abundante hidratación en todo momento. Antes, durante (cada 10/15 minutos, aunque tu cuerpo no te lo pida) y después. Evitarás el agotamiento excesivo y los golpes de calor, uno de los problemas más frecuentes entre deportistas en verano. Una buena solución integrada en los medios de carga (riñoneras, chalecos o mochilas), o un bidón, rígido o flexible, pueden ser nuestros mejores aliados. Ten en cuenta que los músculos deshidratados no funcionan tan eficientemente, por lo que es más probable sufrir un calambre o tirón.

Equípate bien

Muchas personas evitan, equivocadamente, llevar equipación extra en sus rutinas deportivas con el pensamiento de que les molestará por el calor. No caigas en el mismo error. Usa ropa específica especialmente diseñada para aportar la máxima protección a tu cuerpo. Y presta especial atención al calzado. El calzado deportivo protege los pies y ejerce un efecto amortiguador entre éstos y el suelo, ayuda a reducir el esfuerzo de tus músculos y proporciona mayor agarre a las diferentes superficies.

Para terminar con estos consejos deportivos, no queremos olvidarnos de los estiramientos, ignorados demasiado a menudo. Son imprescindibles siempre, siempre. Nos ayudaran a evitar posibles lesiones, a mejorar la circulación y a mantener los músculos sanos y flexibles. Recuérdalo.